Leo “Corvo” Meléndez Acosta.
Hace unos días, Carmen Aristegui
anuncio que regresara a dar noticias en los medios, después del escándalo que
se suscitó por la Casa Blanca y la Primera Dama Angélica Rivera.
Aunque en el vídeo no específico
en que medio va a regresar, se especula muchísimo que será por internet su
regreso al periodismo, lo que abre a una pregunta: ¿México está listo para las
producciones vía streaming?
Semanas anteriores al anuncio de
Carmen Aristegui, Televisa libera su servicio de streaming Blim, que ofrece
material de su televisora (Telenovelas, programas, series y películas) y
extranjeros, vía internet y por suscripción (109 pesos al mes). Una buena idea,
si no fuera por dos problemas: mucho de su catálogo lo puedes ver gratis en
televisión abierta o YouTube, y no ofrece nada nuevo, por ahora.
Sería sumamente interesante ver
nacer una empresa conformada por gente creativa, actores de verdad forjados en
el teatro, comediantes que no se vayan por el humor vulgar, guionistas que han leído historias, directores que aman el buen cine
y productores que tengan ganas de apostarle algo nuevo por un medio nuevo.
Además de sumamente refrescante
porque Televisa ya se le acabo la “gasolina” y está desesperado por recuperar
dinero ahora que el público mexicano descubrió que puede ver otras cosas
diferentes por internet y de que Netflix está haciendo contenido nuevo que no
esta tan limitado por las restricciones de la tele abierta. Ya la fórmula de
copiar historias de otras televisoras, usar actrices o actores mediocres, y pirujas ya no está funcionando. Esta vez “Papa Gobierno” ya no puede ayudarlo.
A México necesita de algo que no
esta tan limitado por la “buena moral” de los anunciantes o que solape el
Pensamiento Mágico que llevamos años viéndolo en las telenovelas, que nos hacen
creer que por gracia de Dios lo bueno llegara solito sin necesidad de un
esfuerzo mínimo.
Pero también va a ser un proceso
arduo porque no todo el país está acostumbrado a ver algo diferente, que no
abuse del humor de albures con chichonas, la historia de la dama de orígenes humildes
que se vuelve directora de una mega empresa (Sin un estudio o preparación
alguna), de programas matutinos conformado por gente sin un atisbo de cultura
general o de críticas precisas.
Carmen Aristegui ya demostró que
si se puede realizar periodismo arriesgado sin necesidad de rendirle cuentas a NADIE. Creo que ya estamos en los tiempos de ver una “Televisora”
que no tema a nada a la hora de contarnos una historia fascinante.
Efectivamente Sr. Goldstain, esperamos con ansias el regreso de Carmen, la calidad de su plataforma digital dependera de la pericia de sus colaboradores, adeptos y grillonautas.
ResponderBorrarEfectivamente Sr. Goldstain, esperamos con ansias el regreso de Carmen, la calidad de su plataforma digital dependera de la pericia de sus colaboradores, adeptos y grillonautas.
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